
Algo que me fascinaba era escuchar las conversaciones de los radioaficionados en las bandas de 80, 40 y 20 metros.
Mi viejo me observaba con curiosidad. Un día me sorprendió con una noticia inesperada. El domingo un amigo de él que era radioaficionado me iba a saludar por la radio.
El domingo sintonicé a la hora y frecuencia indicada.
No podía creer que me estaban saludando por la radio.
Esa primera impresión me llevó a interesarme por el tema de radiodifusión y la actividad de radioaficionado en particular. El tema quedó como materia pendiente, junto con otras tantas.
En 1992 tuve la oportunidad, facilitada por gente amiga, de hacer el curso y obtener mi licencia de radioaficionado, con la señal distintiva LU5ANW. Mantengo mi licencia activa y vigente a pesar de la escasa, casi nula, actividad que desarrollo en el tema.
Probé un poco con equipos ajenos y esperé la oportunidad de tener un transmisor-receptor propio.
Un tiempo después, para mi sorpresa, Matilde me regaló un equipo. Se trata de un Yaesu 857d, como el de esta foto:
al que yo agregué algunos accesorios.
En las fotos que siguen está el equipo "en contexto" o sea en mi desorden habitual, rodeado de todo tipo de cachivaches.
Está conectado con una notebook porque, hoy en día, las comunicaciones de radioaficionados son, en gran parte, digitales y se manejan desde el teclado de la computadora. Es la adaptación de este hobby a la época actual.
Toda estación de radio necesita una buena antena. Yo tengo una pero no muy buena.
Las comunicaciones digitales se manejan con programas en la computadora (software).
Desde la aparición de Internet y la explosión de las comunicaciones, a la gente mas joven le resulta difícil pensar lo que eran las comunicaciones antes. De todos modos, esta forma de comunicación puede sobrevivir a los cataclismos, a la caída de Internet y las redes telefónicas. Sólo depende de tener una fuente de energía eléctrica. Por eso aún es un servicio importante en momentos de catástrofes. El estado así lo reconoce, como un servicio público.
Con la pandemia el tema de la radioafición me quedó en standby. La dispersión entre aficiones complica la cosa. Se verá.